Todos sabemos que el oso pardo (Ursus arctos) es la especie totémica del Parque Natural de Somiedo, cualquier amante de la naturaleza que nos visita espera poder observarlo. Sin embargo, Somiedo cuenta con muchas otras joyas faunísticas dentro de los mamíferos dignas de destacar. En este post nos vamos a centrar en el gato montés (Felis silvestris).
IDENTIFICACIÓN
El gato montés, que podemos confundir con un gato doméstico atigrado es de un tamaño considerablemente mayor, llegando a pesar hasta 6,5 kg algunas hembras y cerca de 7 kg los machos más grandes. El color pardo-grisáceo, con diversas rayas negras distribuidas por cabeza, cuello y extremidades junto con la cola acaba en una borla redonda y negra, pudiendo presentar de tres a cinco anillos negros nos definen a esta especie. Para ampliar información y para aclarar dudas en cuanto a su identificación, os recomiendo visitar la página de la Sociedad Española para la Conservación y el Estudio de los Mamíferos (SECEM), y el interesante blog.
En nuestra última visita a Somiedo pudimos observar a este maravilloso felino en dos ocasiones (4 y 5 de octubre de 2014), a plena luz del día, cazando al campeo, recechando en sendos prados.
ESTADO DE CONSERVACIÓN
El gato montés está protegido desde hace muchos años, encontrándose incluido en el anexo II del convenio CITES.
En la Península Ibérica tanto su distribución como su número se han visto reducidos considerablemente; en la antigüedad ocupaba la práctica totalidad de la península, ahora, en la actualidad sólo lo encontraríamos en zonas de bosque.
La UICN lo incluye en su Lista Roja con un prudente aunque ambiguo «amenazado».
En España puede consultarse su situación en la ficha correspondiente del Atlas y Libro rojo de los Mamíferos de España (MAGRAMA-SECEM 2009) en el enlace.
EL EXPERTO NOS CUENTA
Francisco José García1, reputado zoólogo nos comenta lo siguiente:
«En la mitad sur de España, cada vez resulta más raro ver gato montés, siquiera atropellado. Es una especie que está sufriendo una regresión fuerte en la mitad sur de Iberia; posiblemente dicha regresión sea debida a múltiples factores, entre los que hay que considerar el conflicto con la caza menor y los cazadores, los métodos de trampeo ilegales, los atropellos, el descenso de conejos y problemas derivados del contacto con gatos domésticos: hibridación, enfermedades, competencia, etc. Es una especie vista como un predador que compite con los cazadores por perdices y conejos, y eso le perjudica claramente. En cambio, en el norte se alimentan frecuentemente de micromamíferos, especialmente de ratas toperas, y los paisanos los ven como un aliado para mantener limpios los prados de siega; por tanto tienen una percepción de la especie mucho más positiva, e incluso los gatos en la Cordillera son mucho más diurnos que por ejemplo, en Sierra Morena donde son claramente crepusculares o nocturnos; se puede disfrutar aún de avistamientos de gato montés cazando o soleándose en los prados norteños de forma habitual».
EL GATO MONTÉS EN SOMIEDO
Por todo lo comentado, el poder observar esta especie en total libertad intentando dar caza a un topillo nos llenará sin duda alguna de gran regocijo. Nosotros no descartamos estudiar esta especie en detalle en un futuro en la zona.
Y tú, ¿has visto esta joya somedana?
1Fracisco García es Licenciado en Biología (Zoólogo) por la Universidad Complutense de Madrid, con una amplísima experiencia en trabajos con mamíferos en general y carnívoros en particular, entre los que destacan sus trabajos con nutria paleártica (Lutra lutra), conejo (Oryctolagus cuniculus), gato montés (Felis silvestris) y lince ibérico (Lynx pardinus) o lobo (Canis lupus). Es miembro de la SECEM y forma parte de su Junta Directiva.
¡Enhorabuena por el post Pablo!
Muchas gracias Luis. La verdad es que es un placer poder contar experiencias vividas en ese lugar.
Muy bueno, felicidades por el post Pablo.
Gracias a ti por saber apreciarlo.
Me ha parecido un articulo muy interesante.ENHORABUENA!!!
Muchas gracias a ti, Cristina, por leerlo y valorarlo.